viernes, 6 de abril de 2007

La Madrugá infantil (II)

Solo tengo seis años y ya puedo decir que anoche Sevilla se volvió loca y se pasó la noche viendo pasar estatuas por la calle. Papá volvió de misa por la tarde diciendo que había sido un mal día y que la cena no podría ser mucha y que por eso nos teníamos que conformar con un huevo y unas patatas fritos con aceite del claro. Yo no me lo creí, porque la iglesia estaba llena y eso siempre quiere decir que papá recibe más limosnas y que podemos cenar mejor, pero él dice que estos días la gente sólo se acuerda de su señor y que todas las limosnas son para comprar flores y velas y adornos caros.
Mamá dice que con el dinero que se gastan las hermandades en los pasos podríamos vivir mucho tiempo y que la culpa la tiene la iglesia y que yo nunca crea lo que me dicen los curas porque sólo quieren vivir bien y que no pensemos. Yo no sé si tiene razón pero le digo que sí y ella se pone contenta, y es que ella se lo merece todo, mis abuelos no se lo dieron, mi padre se lo intenta dar y yo seguro que se lo daré.

10 comentarios:

Anónimo dijo...

Desde luego, hay muchas maneras diferentes de ver las cosas, sobre todo si tienes seis años.

Besos desde el agua

myrnâ dijo...

Es una vergüenza todo el dineral que se gasta la iglesia en estas cosas. Cómo todo lo que toca el hombre moderno, se ha vuelto puro negocio. No se si las lágrimas ante la impotencia de no poder sacar a su virgen o cristo por la lluvia, son por devoción o por pura rabia de no poder mostrar el despilfarre de centros florales, ornamentaciones y cirios varios,frente al público y demás hermandades.
Un espectáculo turístico...demasiado caro

Xavi Menós dijo...

diuen que un bon cristià és aquell que va al vaticà i continua sent cristià ;)

molt maco el contrast amic jose !!!!

Actor Secundario Bob dijo...

Saludos del Tío Bob.

santamaria dijo...

Pues toda la razón, es una pasta lo que se gastan, y luego normal que salgan llorando por la tele cuando llueve y no se pueden sacar a los cristos a dar el paseillo.La verdad es que yo en este tema soy un ignorante, pero todas estas obsesiones no son buenas. Menos oro al cristo coño!

Anónimo dijo...

Me remitiré a lo diferente que se vé la vida desde la mirada de un niño de seis años; con respecto a procesiones, devotos y demás comparsa prefiero no opinar y ser sencillamnete respetuoso y educado. (que si se me suelta demasiado la lengua no puedo frenar...)

Anónimo dijo...

Perdona mi irrupción sin ser invitada, llego aquí de rebote vía blog de clipper...

Pero me ha gustado la visión que tienes en esta entrada sobre el tema de las grandes sumas de dinero que se gastan a menudo con fines únicamente estéticos y visuales en un mundo que desgraciadamente va cada vez más a la riqueza y la pobreza extrema...

Si me lo permites, seguiré visitándote...

Besos mil.

Belén dijo...

Bonito post amiguete!

Totalmente de acuerdo con lo que dices entre lineas, de todas formas es menos duro y más inocente cuando lo dice un niño de seis años verdad?

:)))))))))))))))

Isabel Burriel dijo...

Buf, la iglesia. Entre estas barbaridades y las que está haciendo últimamente, se deberían prohibir hasta las procesiones.

clipper dijo...

si que es verdad que se gastan mucho dinero si, es una vergüenza....podrian usar el dinero gastado para la gente necesitada, no es eso lo que pretende Jesus, o eso no hace creer mediante la biblia y todo eso?