martes, 24 de abril de 2007

Mi Sant Jordi

Salgo temprano de casa. Me saluda un fresco y agradable aroma, todas las esquinas del barrio alojan una parada de venta de rosas. Hace un magnífico día, al mirar al cielo para comprobar la ausencia de nubes veo como de los balcones cuelgan varias señeras. Sonrío, la gente se ha acordado que es Sant Jordi, posiblemente, la mejor fiesta de la ciudad.
Doblo la esquina y entro en la floristería. Tras aguardar unos minutos, salgo con un par de rosas bajo el brazo, es lo que tiene tener a dos mujeres en casa. Regreso a casa y las coloco junto a sendos libros (las tradiciones siempre pueden ser adaptadas al gusto), ahora a esperar leyendo la prensa a que todo el mundo se levante.
En una hora ya estamos iniciando nuestro paseo por la Rambla de Catalunya. A penas transcurridos unos minutos, pasa una clase de niños ataviados con batas verdes acompañados por dos monitoras, a lo sumo deben de tener 3 años. Cada uno de ellos agarra su cabo de cuerda con una mano para no perderse y sostiene con la otra un globo, un simple globo amarillo inflado con helio con unas letras pintadas. Qué monos, pienso, y qué atrevimiento el de las maestras. La sorpresa está por llegar, pronto descubro que los globos no son más que propaganda electoral de ERC.
Sin tiempo para pensar en el uso político que se le quiere dar a la fiesta de todos los ciudadanos, veo un nombroso grupo de niños de entre 6 y 8 años, éstos con uniformes impecables. Demasiado mayores para agarrar ninguna cuerda, seguían siendo lo suficientemente niños como para llevar también un globo, un globo como los anteriores, salvo con la particularidad de ser azul. En este caso la propaganda la pagaba CiU.
Más adelante, los globos eran rojos, con las siglas PSC, y los niños no parecían ir en grupo, se iban acercando en parejas o de tres en tres. Hay que decir que no eran simples globos de goma, sino de los que tradicionalmente se llenaban de helio.
Llegando a Gran Via se ve algun que otro globo, pero, o bien ya estoy inmunizado o son mucho menos numerosos. Lo que se ve es una última caseta política, la mejor ubicada de todas las de esa calle, flanqueada por señoras de no menos de 55 años, todas ellas de punta en blanco, ultramaquilladas y recién salidas de Llongueras. No hay niños en busca de globos, ni siquiera de caramelos (como un poco más atrás hacían en la parada de ICV), las sonrientes señoras tan solo reparten folletos, de cuyo contenido siento no poder informaros (no por censura, es que yo no he recogido ni globos, ni caramelos, ni folletos).
En Plaça Catalunya, la gente está alborotada ante las cámaras de TV3, Josep Cuní retransmite en directo su programa desde allí, en lo que supongo que debe de ser un despliegue de medios y una labor de producción muy importante.
Ya es hora de comer, y en esa zona los restaurantes están completos, habrá que ir al habitual. Una vez allí descubriré que Montilla ha tomado la decisión de despolitizar la fiesta omitiendo su discurso institucional, decisión que celebro. Descubriré que la oposición, critica ese hecho alejándose más aún de la opinión de sus votantes. Y planificaré la ruta de la tarde, Les Rambles i Plaça Sant Jaume. Ya no hay flores que comprar, ni siquiera libros que ojear, pero sí fiesta por disfrutar.

Nota: los partidos políticos tan solo tenían una parada en La Rambla y otra en Les Rambles, lo demás eran decenas de puestos de libros y todavía más de rosas, y éstos sí se distribuían por toda la ciudad, incluso por donde no hay cámaras que atesoraran su presencia.

15 comentarios:

Belén dijo...

A mi me parece tan bello la fiesta de Saint Jordi en Barcelona!, lo he pasado un par de veces y he disfrutado como un enano!!!

es triste que se politice las fiestas populares, a mi me saca de mis casillas, pero en fin

Gracias por la crónica!!!

besos!!!

Anónimo dijo...

Ante ciertos libros, uno se pregunta: ¿quién los leerá? Y ante ciertas personas uno se pregunta: ¿qué leerán? Y al fin, libros y personas se encuentran.

Anónimo dijo...

A mi me gusta pasear por Barcelona en Sant Jordi.
Y más que para mirar libros, que eso se puede hacer todo el año más tranquilamente, para observar a la gente, los puestos de rosas...la vida de la ciudad, que por un día se muestra diferente.

Si añadimos el precioso día que tuvimos ayer...todavía mejor!

Besos mil.

Unknown dijo...

Visité Barcelona estas navidades y me pareció una ciudad preciosa, ya había estado más veces pero fugazmente. Me hubiera gustao que Buenafuente me firmara el libro, lo esperaré en Madrid como el año pasado. Saludos!

Xavi Menós dijo...

el meu somni es un dia poder estar en una d-aquestes mobils... quan estava a la uni estudiant a les rambles podia estar hores mirant el desplegament tecnic...

Isabel Burriel dijo...

Con tu descripción has conseguido transportarme a Barcelona, con sus libros y sus rosas. Casi me entretengo leyendo un libro.

Juan Haldudo dijo...

¡Impresionante! ¡Monitoras de tres años!. En fin, me has puesto los dientes largos recordando algunos racons de tu ciudad. Ademas, tengo en pendientes ir a Barna para Sant Jordi y a Valls para la calçotada... Todo se andará.
Saludos.

. dijo...

A mi me has dejado desinflada... ¿como unos y otros le siguen el infame juego a los de siempre?, además se ahorran una pasta en publicidad, propaganda electoral ¡Qué ingenioso! ¡Espera que se exporte esa genial idea!
Si es que no vamos a poder salir de casa...
Saludos

wen- dijo...

calçotada, sant jordi... dios, que ganas de volverme!!!
Es raro , pero a veces uno nace dónde no le toca...

Baba O'Riley dijo...

Es una autentica lastima que politicemos tanto un día tan especial. Yo por mi parte no me acerco a ningún stand que lleve unas siglas políticas inscritas, aunque sean los de mi cuerda.

Abir dijo...

El dia de Sant Jordi a Barcelona no té preu. Transmet una sensació incomparable a cap altre dia de l'any. La ciutat està preciosa!! Ho recordo amb enyorança dels anys d'universitat.
Dilluns em vaig quedar amb les ganes d'anar-hi, espero no fallar l'any que vé.
Un petonet,

Anónimo dijo...

Lástima de política y benditos libros. Feliz día de Sant Jordi (pelín atrasados, lo sabemos)

Besos desde el agua

Rosa azul dijo...

escribes tan lindo que se me contagia la alegria de la fiesta.
dejo caer mis petalos azueles por aca.
creo q te gustan las rosas

myrnâ dijo...

Yo también tengo mi San Jorge , por tierras mañas, aunque este año lo celebré lejos de aquí y parece que lo que toca es que al año que viene celebraré Sant Jordi por ahí, con globos-panfleto electorales y lo que haga falta!
La Rambla?..Les Rambles?? dioss!!ya veo que me voy a perder por Bcn, es hora de comprarse un plànol!1 besico!

Anónimo dijo...

A mí no me gusta el Sant Jordi de las ramblas, ni el de la plaza del pueblo donde vivo, el año pasado siendo domingo y estatut sentí algo cercano a las arcadas. Además me da en pensar en los comentarios al respecto de San Valentín y El Corte Inglés.
Me gusta regalar una rosa a las mujeres de mi vida, me gusta la sorpresa de qué libro recibiré.
Lo demás es lo de siempre.