A menudo observamos con nostalgia el sentimiento de nerviosismo, ilusión y alegría que muestran los niños en estas fechas, aquéllos que tienen la suerte de esperar la llegada de Papá Noel o Los Reyes Magos. Posiblemente todos tenemos algo que alegar frente a estas fechas, todos menos ellos, que las esperan impacientes durante todo el año.
Hoy, cuando en el infomativo hablaban de la compra por parte de Famosa de otras empresas jugueteras para hacer frente a la creciente competencia asiática, he recordado nostálgicamente aquellos años en que preparaba concienzudamente una mesita con polvorones, turrón y cava a la espera de que, en unas horas, en su lugar encontraría mis ansiados regalos. Si tuviera unos años menos la noticia me hubiera alegrado, ya que Sus Majestades deben de ver con buenos ojos poder hacerse con los regalos en el mismísimo oriente, sin embargo, hoy he pensado en otra cosa, qué otras vías tendría Famosa para no sucumbir a la feroz competencia asiática.
La respuesta sólo me la podía dar Dios que, considerando la nueva iconografía que he aprendido en el blog de Alex Guerrero, no es otro que el mismísimo Google. Pero como estas cuestiones no tienen respuestas mágicas ni únicas, me quedo con dos estrategias diferentes a la de la española. ¿Y si se trabaja en dos frentes, si se focaliza tanto el mercado de los niños como un mercado con ausencia de niños? Acabo visitando las webs de dos grupos a los que pertenecen Chicco (nunca conseguí el Chicco Rodeo) y Mr. baby, sonrío, me sorprendo, qué brillante. Sendos grupos han apostado por un mercado completamente diferente: el de los preservativos. El primero de ellos aglutinando la marca Control, el segundo, la también puntera Durex. Efectivamente, ellos siempre ganan.
Hoy, cuando en el infomativo hablaban de la compra por parte de Famosa de otras empresas jugueteras para hacer frente a la creciente competencia asiática, he recordado nostálgicamente aquellos años en que preparaba concienzudamente una mesita con polvorones, turrón y cava a la espera de que, en unas horas, en su lugar encontraría mis ansiados regalos. Si tuviera unos años menos la noticia me hubiera alegrado, ya que Sus Majestades deben de ver con buenos ojos poder hacerse con los regalos en el mismísimo oriente, sin embargo, hoy he pensado en otra cosa, qué otras vías tendría Famosa para no sucumbir a la feroz competencia asiática.
La respuesta sólo me la podía dar Dios que, considerando la nueva iconografía que he aprendido en el blog de Alex Guerrero, no es otro que el mismísimo Google. Pero como estas cuestiones no tienen respuestas mágicas ni únicas, me quedo con dos estrategias diferentes a la de la española. ¿Y si se trabaja en dos frentes, si se focaliza tanto el mercado de los niños como un mercado con ausencia de niños? Acabo visitando las webs de dos grupos a los que pertenecen Chicco (nunca conseguí el Chicco Rodeo) y Mr. baby, sonrío, me sorprendo, qué brillante. Sendos grupos han apostado por un mercado completamente diferente: el de los preservativos. El primero de ellos aglutinando la marca Control, el segundo, la también puntera Durex. Efectivamente, ellos siempre ganan.
1 comentario:
Eps.. ondia molt interessant aixo del canvi de mercat de les cases de juguets.
Aquests diria q fa temps que ja amb l'arribada dels ordinadors i consoles ja veien q se'ls hi acabava el xollo de les joguines tradicionals.. i com diuen renovar o morir!!
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